domingo, 13 de diciembre de 2015

GRANADILLA : IDEAL PARA CUIDAR EL SISTEMA DIGESTIVO



La Granadilla es una fruta muy consumi­da y cultivada en nuestra región sobre todo en las zonas más templadas como Huánuco y sus distritos Kichcki y la parte alta de Chu­rubamba, siendo una magnifica opción de cultivo frutal para el consumo en las familias campesinas que también la comercializan, convirtiéndose en un cultivo comercial.
La granadilla es una de las especias de la pssiflora, o “flor de la pasionaria”, que ya la describimos cuando hablamos del maracuyá, siendo la granadilla y el maracuyá prove­nientes de la misma especie. Como recorda­ran este nombre de “pasionaria” fue dada por los primeros Jesuitas que al conocerla, encon­traron en esta flor y planta, algunas caracte­rísticas que les evocaba a la pasión de cristo, como la apariencia de la flor, de una corona de espinas; los cinco pétalos y cinco sépalos simbolizando a los diez apóstoles (doce, me­nos Judas Iscariote y Pedro), mientras que los cinco estambres representarían los cinco es­tigmas, los tres pistilos corresponderían a los clavos de la cruz y sus zarcillos representan los látigos con los cuales cristo fue azotado.
El maracuyá tiene como denominación científica Passiflora Edulis y la granadilla es la Passiflora ligularis, la diferencia organoléptica entre ambas especias es fácil de definir por los consumidores, su dulzor, la granadilla contiene mayor cantidad de azúcar, es muy suave para el paladar y para el estómago.
Las granadillas son frutas ricas en vitami­nas conteniendo vitaminas del complejo B como la tiamina, riboflabina, niacina y ácido fólico, las tres primeras involucradas en las funciones del sistema nervioso, por ello la fama de la granadilla de ser tranquilizante y ayudar a favorecer el sueño, y el ácido fólico en su intervención para la formación de los glóbulos rojos, otra de las funciones de las vi­taminas del complejo B es la de mejorar del metabolismo y el aprovechamiento del orga­nismo de la energía y proteína consumida de los alimentos, muy útil en los niños pequeños que inician su alimentación por las pequeñas cantidades de alimentos que consumen.
La granadilla es en nuestra cultura la fru­ta pediátrica por excelencia, ya que activa el timo en la digestión, favorece la maduración del sistema digestivo, controla la hiperacidez y está indicada incluso para controlar el re­flujo gástrico común en los niños que inician sus alimentación, por ello es recomendado (jugo de granadilla) como primer alimento a consumir en los niños que van a iniciar su ali­mentación con productos sólidos.
Posee vitamina K, la que interviene di­rectamente en la coagulación sanguínea y
en la formación de proteínas sanguinas que también van a intervenir en la coagulación como la protrombina, Tiene vitamina C que va a mejorar el sistema nervioso, vitamina E, que es un potente antioxidante para pre­venir el envejecimiento y el desarrollo de en­fermedades degenerativas y carotenos que en nuestro organismo se convertirán en vi­tamina A, esta característica es muy impor­tante sobre todo en los niños de seis meses que están comenzando alimentarse, ya que están en peligro de sufrir deficiencia de esta vitamina, ya que la leche no posee Retinol y su cantidad de vitamina A es baja.
Entre los minerales importantes que po­see están el potasio y el magnesio importante para la trasmisión de impulsos nerviosos, el potasio además para regular el líquido intra y extracelular y el magnesio para mejorar el sistema inmunológico.
Es un eficaz laxante por su alto contenido de fibra, pero sus pepas deben ser evitadas en personas con problemas de diverticulitis, el jugo por el contrario es bien aceptado y me­jora incluso por problemas de ulceras diges­tivas.
Entonces si no tenemos problemas como la ya mencionada (diverticulitis) aproveche­mos el consumo de la granadilla con todo y pepas para optimizar el consumo de todos los beneficios que nos trae esta fruta regional.

Carlos Velásquez Sánchez

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