domingo, 7 de diciembre de 2008

COSTUMBRES Y TRADICIONES SELVATICAS DE TIEMPOS PASADOS EN NUESTRA SELVA PERUANA

FIESTA DEL CARNAVAL

Esta fiesta patronal duraba 06 días, todos los socios se reunían para acordar la fecha que van a prender la yunsa. Hacían bastante masato, chichas, tortillas, inquirís y cada socio ponía una gallina. Iban a cazar animales selva adentro, para que coman en la ayudanteada. Ellos no pandillaban con el clarín ni con el bombo, solo con un tambor pequeñito y una quena chiquita, con eso pasaban la noche, pandillando el cabezón con su esposa. Ellos llevaban una cinta con puras tortillas y al final llevaban una lagartija grande, pero preparado de harina de maíz que lo llevaba el cabezón y su esposa llevaba una corona de tortillas. Cada socio se disfrazaba de lo que querìa, se pònìan màscaras de diablos con cuernos, otros llevaban la bandera y otros se disfrazaban de mujeres.
En la antigüedad jugaban con bolsas en lugar de globos, para pintar molían carbòn, le echaban aceite para que quede como grasa, tambièn usaban el famoso achiote de color rojo. Paseaban por las calles durante dos horas pandillando y recorrìan todo el pueblo en estas fiestas de carnaval de antes.

LA UMBASHA

La umbasha contenìa algunos vìveres y carne. El dìa Domingo por la tarde prendìan la umbasha y a las 4.00 p.m. se iban a enterrar un chancho y un gallo. El cabezón y su esposa, lo mataban bien vendados los ojos, con una vara lo empezaban a golpear ciegamente. El cabezón mataba al chancho y su esposa mataba al gallo a palos. Una vez que morìan ambos animales, les sacaban las vendas de los ojos a los pasantes y ellos mismos lo entregaban a los que van a pasar el siguiente año esta fiesta.
Asì eran nuestras fiestas tradicionales y patronales en nuestra antigüedad, asì lo han vivido nuestros viejitos. Ahora es de otra manera, como dice un dicho: ”los viejos a la tumba y los jóvenes a la obra”. Esto no quiere decir que formemos una nueva vida, sino seguir adelante. La ciencia cada dìa sigue avanzando.

LA FIESTA DE NAVIDAD

Antes la fiesta de navidad lo celebraban como una fiesta patronal que duraba 06 dìas. Los 3 primeros dìas preparaban chicha y todo se tomaba. Esto era hecho por 15 ayudantes. Cada ayudante entregaba su carne, el cabezón los llevaba al monte a cazar hasta que completen 78 kgs. De carne completaban ese kilaje y regresaban. Lo traìan a casa del cabezón (mayordomo) y lo hacìan secar en grandes barbacoas, mataban chanchos, venados y gallinas para la comida. Preparaban tambièn para el voto con harina de maìz: tortillas, pushcos, rosquillas; de bebidas: masato, ventisho y mula-supi que era una bebida hecha de masato mezclado con aguardiente que te convertìa en un borracho supitero o sea te ibas en pedos.
Antes, toda fiesta patronal se celebraba con lo tìpico: quena, tambor, cajas y pifanos. Ahora hay bombos, clarinete, tambor y saxofón, o como dicen en la selva: saxafòn.

PROCESIONES
Toda la gente que acompañaba llevaban su mechero(alcuza)o velas. La procesiòn salìa en andas, todo el pueblo llevaba al Niño Manuel y pedìan limosnas. Terminaba la procesiòn y lo velaban en la casa del cabezón. Después que terminaba el rosario a las 12 de la noche empezaban a bailar (danzas, chimayches, tahuampas y cumbias). Antes, en esta clase de fiestas de navidad no se comìa panetón, porque no habìa en ese tiempo, se comìa puro japonès, bizcochuelos o keikes.

AÑO NUEVO

El año nuevo lo celebraban con todos los familiares, en la noche comìan y tomaban, bailaban con sus parejas, las mujeres que tenìan esposos, los que no tenìan esposos no bailaban, no comìan el japonès o keike, ellos preparaban sus dulces, pushcos, angos, tortillas, pollo al horno o chancho.
Por cada calle hacìan sus concursos de “pilatos” (muñecos de trapo) los quemaban a las 12 de la noche y al ganador le regalaban un tiesto grande con todo tipo de bocaditos, este regalo lo hacìan las autoridades del pueblo. Y en esa noche toda la gente se preparaban y salìan con su mochila por la calle y les daban la mano a todo el que encontraban y luego hacìan un simulacro de que estaban viajando. Iban despidiendo el año viejo y se iban botando unas flores blancas por las calles.

Carlos Velásquez Sánchez

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