Hasta el lejano Caserío La Botella (CHICAMA) llegaron el alcalde David Valderrama, los regidores Armando Tandaypán, Anyela Barrantes y algunos funcionarios municipales para llevar apoyo a los moradores de la zona. Las madres de familia acompañados de sus pequeños hijos bajaron desde sus parcelas que se encuentran en las faldas de los cerros para recibir prendas de vestir y víveres.
El Alcalde expresó a los pobladores que aun se acuerda de ellos porque un alcalde no solamente debe recorrer los pueblos lejanos en época electoral. “A iniciativa de la regidora Anyela Barrantes y el regidor Armando Tandaypan se ha conseguido un granito de arena para compartir con ellos”.
El Teniente gobernador del caserío La Botella agradeció al alcalde Valderrama y regidores por el apoyo.
La regidora Anyela Barrantes agradeció a los trabajadores municipales por su contribución con víveres y también al Consejero Regional Luis Solano, al Adminsitrador de la UGEL Hugo Tapia, etc. por los donativos brindados.
Los pequeños niños entusiasmados se despojaron de sus llanques apara medirse los zapatos.
Los funcionarios municipales ayudaban en la distribución. Todos los presentes llevaron varias prendas de vestir y sus respectivos víveres.
Aun quedaba ropa para donar, razón por la cual se dirigieron a Huabalito donde se distribuyó víveres y ropa entre los pobladores y niños que se reunieron.
El Alcalde expresó a los pobladores que aun se acuerda de ellos porque un alcalde no solamente debe recorrer los pueblos lejanos en época electoral. “A iniciativa de la regidora Anyela Barrantes y el regidor Armando Tandaypan se ha conseguido un granito de arena para compartir con ellos”.
El Teniente gobernador del caserío La Botella agradeció al alcalde Valderrama y regidores por el apoyo.
La regidora Anyela Barrantes agradeció a los trabajadores municipales por su contribución con víveres y también al Consejero Regional Luis Solano, al Adminsitrador de la UGEL Hugo Tapia, etc. por los donativos brindados.
Los pequeños niños entusiasmados se despojaron de sus llanques apara medirse los zapatos.
Los funcionarios municipales ayudaban en la distribución. Todos los presentes llevaron varias prendas de vestir y sus respectivos víveres.
Aun quedaba ropa para donar, razón por la cual se dirigieron a Huabalito donde se distribuyó víveres y ropa entre los pobladores y niños que se reunieron.
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