El Día de la Madre es la fecha que rinde homenaje a la maternidad y nos recuerda su lado dulce y más gratificante: las sonrisas de los niños, la sensación de plenitud en la vida, el crecimiento pèrsonal que implica, las recompensas al esfuerzo diario y el placer de ver crecer a los hijos y acompañarles en la vida.
El Día de la Madre, también nos puede servir para reflexionar sobre el valor social que se otorga a la crianza y las condiciones que existen para ello, el amor infinito hacia los hijos y buenas intenciones, el país donde formemos nuestra familia determina y facilita esta labor o la perjudica.
Hoy amanece, como un día cualquiera, pero, con un significado especial que queremos que vaya más allá de un lema en los centros comerciales.
Un significado especial para aquellas mujeres que van a ser mamás o que ya lo son, en el Día de la Madre, que se celebra el primer domingo de mayo en muchos lugares.
Mujeres que esperan tan solo que ellos estén bien para pasar un día, éste, el resto de días junto a sus hijos y que recuerden el momento del parto con emoción. Que pasan noches en vela cuando sus hijos no pueden dormir, como mi mamá Enma cuando desvelaba por cuidarme cuando enfermaba. Que reciben sus primeras palabras, sus primeros pasos, sus primeras manualidades, de felicitación con lágrimas en los ojos y la mayor de las alegrías. Que lo abandonan todo para poder estar con ellos en sus primeras vivencias en este mundo. Que se organizan mágicamente para poder con el trabajo, con la casa y con una misma sin caer derrotada en el esfuerzo. Que no ven el momento de regresar a su lado. Que ven crecer a sus hijos, orgullosas y ven llegar a sus nietos, nuestras mamás, mamás y abuelas a las que tanto debemos.
Como mi querida mamá Enma Sánchez, le debo mucho, porque por mí se desvelaba, repito, cuando enfermaba y hasta la fecha siempre se preocupa por mí, y a veces pienso que yo no merezco tanto cariño, porque soy el hijo preferido de mi madre entre diez hermanos, porque me pregunto, habré sido un ingrato al venir a vivir a esta linda tierra tan lejos de ti mamá, pero así es la vida, porque tú sabes que soy feliz en tu tierra al lado de mi amor y muñeca Rogelia, mis hijos y nietos.
Mamá, te quiero mucho y éste es mi pequeño homenaje a ti y a todas las madres, a los que la maternidad las hizo mejores, más grandes, más llenas, más vivas y más amorosas. Y para ti, mamá Enma de Jesús y mis hermanas Alicia (en el cielo), Isabel, Enma y Miriam ¡FELIZ DIA DE LA MADRE! LOS QUIERO MUCHO.
Carlos Velásquez Sánchez
Hoy amanece, como un día cualquiera, pero, con un significado especial que queremos que vaya más allá de un lema en los centros comerciales.
Un significado especial para aquellas mujeres que van a ser mamás o que ya lo son, en el Día de la Madre, que se celebra el primer domingo de mayo en muchos lugares.
Mujeres que esperan tan solo que ellos estén bien para pasar un día, éste, el resto de días junto a sus hijos y que recuerden el momento del parto con emoción. Que pasan noches en vela cuando sus hijos no pueden dormir, como mi mamá Enma cuando desvelaba por cuidarme cuando enfermaba. Que reciben sus primeras palabras, sus primeros pasos, sus primeras manualidades, de felicitación con lágrimas en los ojos y la mayor de las alegrías. Que lo abandonan todo para poder estar con ellos en sus primeras vivencias en este mundo. Que se organizan mágicamente para poder con el trabajo, con la casa y con una misma sin caer derrotada en el esfuerzo. Que no ven el momento de regresar a su lado. Que ven crecer a sus hijos, orgullosas y ven llegar a sus nietos, nuestras mamás, mamás y abuelas a las que tanto debemos.
Como mi querida mamá Enma Sánchez, le debo mucho, porque por mí se desvelaba, repito, cuando enfermaba y hasta la fecha siempre se preocupa por mí, y a veces pienso que yo no merezco tanto cariño, porque soy el hijo preferido de mi madre entre diez hermanos, porque me pregunto, habré sido un ingrato al venir a vivir a esta linda tierra tan lejos de ti mamá, pero así es la vida, porque tú sabes que soy feliz en tu tierra al lado de mi amor y muñeca Rogelia, mis hijos y nietos.
Mamá, te quiero mucho y éste es mi pequeño homenaje a ti y a todas las madres, a los que la maternidad las hizo mejores, más grandes, más llenas, más vivas y más amorosas. Y para ti, mamá Enma de Jesús y mis hermanas Alicia (en el cielo), Isabel, Enma y Miriam ¡FELIZ DIA DE LA MADRE! LOS QUIERO MUCHO.
Carlos Velásquez Sánchez
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