Luis Ordóñez
Mar 11 may 10
La entrega de títulos de propiedad por autoridades a agricultores no debe ser noticia; pues, la titulación debe ser una actividad de rutina, condición vital para la propiedad de la tierra. El proceso debe darse en oficinas descentralizadas, de manera fácil y permanente.
No debe ser noticia que Cofopri pase a los gobiernos regionales, por que nunca hubiese salido de allí y tampoco se hubiese mantenido tanto tiempo donde está.
No es correcta la creación de proyectos o programas para titular tierras en pequeños ámbitos (aunque sea con donaciones). La regularización técnica legal de la tenencia de la tierra rural debe ser un proyecto o programa regional necesariamente (nacional), con oficinas implementadas y técnicos altamente capacitados, para procurar desterrar la corrupción, muy amigable a ésta actividad.
La tenencia de la tierra rural no es estática, es tan dinámica que requiere de un soft ware (programa informático computarizado) especializado exclusivo satelital en red, para mantener la información en tiempo real. En ese contexto, debe hacerse el trabajo de campo de todas las parcelas (y toda la superficie de la región) de manera georeferenciada, con coordenadas, donde además de los linderos perimétricos, se define el uso natural de la tierra según su capacidad y se determina el actual que tiene la parcela. Esta información se pasa al programa. Luego, se determina el plan definitivo de uso de la parcela, con las áreas para producción alimenticia y agroindustrial, el bosque familiar, forestal y la faja marginal.
Con ésta información, tenemos las parcelas bien definidas con linderos, con uso actual, con el plan de uso futuro y con sus propietarios reales. No debe existir un palmo de terreno sin estas definiciones; inclusive, las áreas de conservación, de protección, territorios de comunidades nativas, fajas marginales, lechos de fuentes de agua, islas y accidentes naturales.
A partir de esta información, el servicio de cambio de tenencia y de uso debe brindarse con la mayor celeridad, ofreciendo datos al tiempo real, en las oficinas descentralizadas de la región (país), a un costo moderado.
La viceministra de agricultura de Venezuela, manifestó el año 2008 en Piura, que estaban terminando este tipo de proyecto a nivel nacional, con conceptos y principios similares a los que aquí se plantean.
No debe ser noticia que Cofopri pase a los gobiernos regionales, por que nunca hubiese salido de allí y tampoco se hubiese mantenido tanto tiempo donde está.
No es correcta la creación de proyectos o programas para titular tierras en pequeños ámbitos (aunque sea con donaciones). La regularización técnica legal de la tenencia de la tierra rural debe ser un proyecto o programa regional necesariamente (nacional), con oficinas implementadas y técnicos altamente capacitados, para procurar desterrar la corrupción, muy amigable a ésta actividad.
La tenencia de la tierra rural no es estática, es tan dinámica que requiere de un soft ware (programa informático computarizado) especializado exclusivo satelital en red, para mantener la información en tiempo real. En ese contexto, debe hacerse el trabajo de campo de todas las parcelas (y toda la superficie de la región) de manera georeferenciada, con coordenadas, donde además de los linderos perimétricos, se define el uso natural de la tierra según su capacidad y se determina el actual que tiene la parcela. Esta información se pasa al programa. Luego, se determina el plan definitivo de uso de la parcela, con las áreas para producción alimenticia y agroindustrial, el bosque familiar, forestal y la faja marginal.
Con ésta información, tenemos las parcelas bien definidas con linderos, con uso actual, con el plan de uso futuro y con sus propietarios reales. No debe existir un palmo de terreno sin estas definiciones; inclusive, las áreas de conservación, de protección, territorios de comunidades nativas, fajas marginales, lechos de fuentes de agua, islas y accidentes naturales.
A partir de esta información, el servicio de cambio de tenencia y de uso debe brindarse con la mayor celeridad, ofreciendo datos al tiempo real, en las oficinas descentralizadas de la región (país), a un costo moderado.
La viceministra de agricultura de Venezuela, manifestó el año 2008 en Piura, que estaban terminando este tipo de proyecto a nivel nacional, con conceptos y principios similares a los que aquí se plantean.
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