lunes, 2 de octubre de 2017

ALFONSO UGARTE DE CHICLIN : EL PRIMER CAMPEON DE LA COPA PERU Y EL DE LOS PARTIDOS INOLVIDABLES




Alfonso Ugarte de Chiclín, cuadro fundado en una hacienda, ya sabe lo que es ganar la Copa Perú. Y tiene muchas historias que pocos conocen. 
Han pasado cincuenta años y poco se conoce del valor de Alfonso Ugarte de Chiclín, el primer campeón de la Copa Perú, que no solo hizo historia en el ‘fútbol macho’, sino también, en la época amateur, cuando no existía fútbol profesional ni Descentralizado, allá por la década de los treinta y cuarenta.
El título de la Copa Perú 1967 marcó la historia de Alfonso Ugarte de Chiclín (poblado de Chicama, Ascope, La Libertad), que lleva una estrella en su camiseta y que hoy la luce en la Etapa Nacional de la Copa Perú actual, en la que participa por primera vez en busca del ascenso.

Aquella primera edición de la Copa Perú significaba, además, la primera oportunidad para varios de equipos de provincia de empezar a meterse en ‘fútbol grande’ y así, ‘empatarse’ con populares como Alianza Lima o Universitario.

Y Alfonso Ugarte de Chiclín ganó el hexagonal de aquella Copa Perú a referentes del interior como Melgar de Arequipa (1-0), Cienciano del Cusco (2-0), CNI de Iquitos (4-1), Juan Aurich (0-2) y Octavio Espinoza de Ica (3-2).

Tal proeza le dio el derecho de jugar el segundo campeonato peruano Descentralizado de la historia. Un año antes, en 1966, el mismo Alfonso Ugarte de Chiclín había participado del primero, por una invitación de la Federación Peruana de Fútbol. Pero descendió.

El plantel de Alfonso Ugarte de Chiclín se dio el lujo de ser recibido en Palacio de Gobierno por Fernando Belaunde Terry, presidente en aquel entonces. Esos fueron los últimos rastros de un equipo que décadas atrás, ya era conocido por sus hazañas.

La época dorada 

Fundado el 1 de agosto de 1917, Alfonso Ugarte de Chiclín comienza a participar en la Liga de Trujillo. En aquella época, el fútbol era amateur: no había liga profesional en Lima ni Descentralizado, por lo que algunos clubes de provincias eran invitados para sostener amistosos o hacer giras. Y así, el equipo del valle de Chicama empezó a destacar.

"Su primer partido internacional lo jugó el 28 de mayo de 1936 ante Gimnasia y Esgrima de Santa Fe, en el Estadio Nacional de Lima. Alfonso Ugarte tuvo como refuerzos a Lolo Fernández y Segundo 'Titina' Castillo, pero perdió 3-2. Igual, la gente los despidió con aplausos", cuenta Pedro Villanueva, periodista trujillano.

El impulso del cuadro liberteño fue gracias al apoyo de la familia Larco, dueña de la hacienda donde surgió el club. Rafael Larco Herrera y su hijo Rafael Larco Hoyle fueron los gestores claves para que el equipo tenga roce: en la capital jugó ante la ‘U’, Sport Boys, entre otros.

En uno de sus amistosos más famosos, Alfonso Ugarte enfrentó a Independiente de Avellaneda, cuadro que llegó a Chiclín para jugar un partido en 1942. “Los señores Larco, al enterarse que Independiente de Avellaneda había llegado a Lima, lo invitaron. Seis mil personas presenciaron el encuentro y la entrada costó 1 sol con 65 centavos”, recuerda Villanueva.
Alfonso Ugarte de Chiclín ganó 2-1, en un triunfo de gran repercusión. Y por eso, nació el apodo con el que todos conocen al cuadro liberteño: ‘Diablos Rojos’, según cuenta el presidente del club, Javier Castro.

Otro partido recordado lo jugó en 1947. El rival fue la selección peruana. Alfonso Ugarte de Chiclín no se achicó y volvió a golpear. "El primer tiempo terminó 3-1 y ganaba el Ugarte. En el entretiempo hubo conversaciones entre dirigentes y al final, terminó 4-4”, relata Villanueva.

Descenso,  crisis y su actualidad:

“La reforma agraria que hizo Juan Velasco Alvarado (presidente del Perú entre 1968 y 1975) arruinó todo el agro en el norte y el Alfonso Ugarte perdió mucho. Hoy de Chiclín hacienda no queda nada, solo es un centro poblado”, reseña Villanueva.

Fue así como en las últimas décadas, los ‘Diablos Rojos’ solo peleaban por mantener la categoría en la Liga de Trujillo. En algún momento, los chiclinenses disputaban el clásico regional ante Carlos A. Mannucci. Aunque solamente chocaron en la Copa Perú.


Cincuenta años después de ganar la primera Copa Perú y en plena celebración de sus cien años, Alfonso Ugarte de Chiclín quiere dejar atrás las notas periodísticas de diarios antiguos y la tradición oral de sus gestas de antaño, para escribir una nueva historia. Algo de ‘Diablo’ le queda.

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